Si alguien llegara, y te preguntara si tienes éxito en tu blog o tu tienda electrónica, ¿en qué basarías tu respuesta?
Seguramente tendrías que recordar las gráficas que te brindan las estadísticas de tu web, e interpretar si éstas reflejan un aumento o decrecimiento de tus visitas.
Pero desde aquí te pregunto: ¿sabes qué hacen tus visitantes cuando visitan tu página web?
Normalmente las métricas nos dicen cuántos visitantes tenemos, de dónde vienen, qué páginas visitan, pero no qué hacen dentro de esas páginas, dónde hacen clic y qué partes de la web son mucho más atractivas para ellos.
La solución es usar un mapa de calor que te muestren realmente eso: el comportamiento de tus visitantes.
La mejor herramienta, actualmente, sin duda es Ptengine: reúne la métrica tradicional y mapas de calor.
Te cuento por qué es una opción para basar todas tus métricas.
Mapas de calor
Supongamos que en tu blog, que intentas monetizar, tienes colocados dos botones, uno para comprar, y el otro para enviarte consultas. Con un mapa de calor, podrás saber no solo la parte de tu landing page que más leen u observan tus visitantes, sino dónde hacen clic, sabiendo qué ignoran. Así, podrás cambiar de sitio tus botones y llamadas a acción.
Para ello, Ptengine crea un mapa de calor de atención, es decir, detecta dónde centra la atención tus visitantes, así podrás saber si tus contenidos, como las imágenes o la redacción, están reteniendo o no a tus visitantes. Éste es un ejemplo de este mapa de calor.
Como podrás ver en éste ejemplo, la atención se dirige al texto que describe el contenido de la página, y se pierde conforme el cliente desliza su pantalla hacia abajo. El problema en éste ejemplo es que la atención no llega a los productos. Si el ejemplo fuese real, habría que tomar muchas medidas.
Pero no solamente puedes hacer un mapa de calor de clics, es decir, rastrea todos los clics que hacen los visitantes, así podrás saber qué elementos son los que mueven más a tus visitantes y cuáles menos… si ninguno es el botón “comprar”, debes tomar medidas en base a dicho mapa de calor.
No solo eso, puedes comparar distintos mapas de calor.
Vale, pero ¿por qué éstos mapas de calor son mejores? Porque puedes modificarlos, crear distintas campañas, compararlos y hacer cosas distintas con cada uno.
Sin duda, tendrás una radiografía detallada de qué hace tu visitante en cada momento.
ptengine aporta analítica con vitaminas
No todo es mapas de calor con Ptengine, sino también la tradicional métrica por gráficas de barras y tartas, pero con vitaminas.
Imagina que tienes campañas con Google Adwords, u otras de alto costo, ptengine tiene consolas para analizar el tráfico proveniente de dichas campañas para que sepas evaluar su éxito.
El otro distintivo de las métricas de ptengine, es el fácil uso de unos potentes filtros a fin de evaluar el comportamiento de los visitantes a tu tienda o blog.
Para terminar, te cuento que ptengine está completamente en español, tanto el sitio web como el producto, y tiene distintos paquetes, dependiendo de tus necesidades, partiendo de un servicio gratuito que te permite un mapa de calor, un dominio y 1.000 páginas vistas mensuales. Si necesitas más, las tarifas comienzan desde 7 € mensuales, el precio de un par de cervezas en un bar, hasta un servicio completo para 50 dominios, por si tienes una red de sitios o franquicias a las que sea importante monitorizar.
Edmundo Pérez es licenciado en Administración, mexicano y radicado en Cáceres, instructor de diseño web en Flash cuando todos lo usaban, fascinado por la difusión de la ciencia y la cultura y aprendiz de Inbound Marketing, comparto lo que he aprendido de ello en Branketing.
¡Gracias Bloguismo!
Consigue 3 meses gratis cuando comparte este artículo con tus amigos en Facebook!
Para validar estos tres meses, enviar una captura de pantalla de guy.geeraedts@ptengine.com
Es una herramienta muy interesante y potente, se le puede sacar mucho partido. Hablando sobre este tema, la realidad es que muchas veces, un gran número de visitas no es la clave para llegar. La gente puede cerrar una página igual que la abre, no interesarse por tu producto o pensar que es más de lo mismo. Al final, la clave es cuánto tiempo permanecen en una web y si curiosean por ella.