Cuando tenemos, aunque sean, unos pocos días de vacaciones, lo primero que se nos viene a la mente es hacer un buen viaje. Sin embargo, no siempre logramos reunir el dinero que nos hace falta o no sabremos cuándo serán nuestras vacaciones, que complica conseguir billetes de transporte baratos.
A pesar de todo esto, hacer viajes baratos es más fácil de lo que parece. Por eso, en Bloguismo te vamos a dar algunas ideas de viaje que no necesitarás planificar con mucho tiempo y que, seguro, te saldrán muy baratos.
A la aventura en coche
Los viajes en coche, o como se suelen llamar hoy en día, road trip, son viajes perfectos para gente que quiere disfrutar de los paisajes que tiene relativamente cerca de casa. Con un coche se puede recorrer una comunidad entera, pero con furgonetas camperizadas se pueden recorrer miles de kilómetros sin pagar alojamiento.
Y es que, ¿quien no sueña con despertarse cada mañana en un lugar diferente? Esta es, probablemente, la opción más barata para recorrer un país, parando donde realmente te gusta y descubriendo mucho más que las grandes ciudades. Sin duda, una forma de viajar barata y que dejará muy buenos recuerdos en tu memoria.
Visita una capital europea
Si sabemos con un poco de antelación cuándo serán nuestras vacaciones y cuánto durarán nos podemos planificar para ahorrar un poco y comprar un vuelo para alguna ciudad europea. Aunque visitar las capitales es maravilloso y podemos conseguir muy buenos precios gracias a los comparadores, lo cierto es que visitar ciudades más pequeñas y menos conocidas (o al menos no tan populares como París, Londres o Roma) puede salirnos realmente barato.
Además, otro punto a favor de este tipo de ciudades es que el alojamiento, la comida y todo este tipo de cuestiones, suelen ser mucho más baratos; así podréis encontrar tours gratuitos por las ciudades e, incluso, museos de entrada libre. De todos modos, ¡viajéis donde viajéis os lo pasaréis de maravilla!
Un destino rural
Para los que tienen las vacaciones de imprevisto o cuentan con muy pocos días para disfrutar y no tienen mucho dinero quizás la mejor opción sea un destino rural cercano a su ciudad. Con este tipo de destinos ahorrarás mucho en transportes y te podrás permitir otros lujos como cenar en algún restaurante o realizar alguna actividad de pago (montar a caballo, una ruta de senderismo, sky acuático…).
Estos pueblos no tienen por qué estar ni a 100 kilómetros de tu casa y, en ellos, puedes disfrutar de unos días tranquilos, de aire limpio y fresco y buena comida. Además, las casas y hoteles rurales cada día son más sorprendentes, por lo que puedes ahorrar dinero en el viaje y permitirte, por ejemplo, un hotel con spa o un balneario.